La Hora del Ahora
Y así enloquecieron las manecillas del reloj: Cuando a medio metro del asfalto sintieron el vértigo instaurarse en el corazón de quienes, fuesen en ese extremo instante, esclavos de su tiempo. Ahora, a la hora del ahora, llama a la puerta el deseo de un amor, sutilmente adherido, que se rehúsa a no ser imaginado, implosivo.
Anna Bahena.
6 comentarios:
Por fin puedo volver a dedicaros algo de tiempo a los blogs amigos. Como siempre un placer leerte, pero te lanzo una pregunta al aire: ¿Quien no ha sido alguna vez esclavo del reloj?
Me gustan tus palabras. Tus letras danzan frente a mí con un baile que atrapa mi imaginación.
Te felicito.
Me hiciste acordar del aquel bolero que comenzaba más o menos asI: " reloj no marques las horas...". Hermoso texto. Abrazos.
Tu poesía siempre va más allá.
Me gusta venir y pensar en lo que nos dejas.
Un abrazo cariñoso
Beijos pintados, alados, estrelados... Saudades de ti, menina Anna.
El tiempo...
Que por nada se detiene.
Te envío mi abrazo.
Dani..
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