Poema Sin Nombre
Atrapadas en medio de la tarde
las alas del corazón
ondean con la piel bañada en llanto.
Imploro olvidos evocando tu nombre,
que vibra con la fuerza de un huracán
tumbando las puertas que se abren
piel adentro, dentro, dentro de las venas.
Un río de sangre nace del corazón
bañando todos los recuerdos que dejó
tu paso por el vasto país de mis heridas.
Una lágrima cae al abismo
desde la cima de mis ojos.
La noche espera en silencio
que el reloj deje de latir
en la pared y el tic tac devuelva al corazón
las alas que fueron ave entre tus manos.
Anna Bahena.
Etiquetas: Imagen By Georgia Simandan
1 comentarios:
Sí, Anna. Es frecuente que el corazón se quede sin alas. Hay relojes que desde el silencio de quienes cultivan su ritmo llegan al lector como un tictac que le devuelve el vuelo.
Gracias.
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